¿Alguna vez te has dado cuenta de cómo una silla de trabajo bien diseñada o un mesa colocada en el lugar correcto pueden hacer que tu día sea más fluido y productivo?
Eso no es solo cuestión de suerte: es la ergonomía en acción. Demos un paso atrás y volvamos a lo básico:
¿Qué es la ergonomía?
La ergonomía es la ciencia que diseña mobiliario, herramientas y entornos que fomentan los movimientos y las posturas naturales del cuerpo.
Se trata de crear espacios que se adapten a ti - y no al revés - . Ya estés trabajando desde casa, estudiando o simplemente descansando, la ergonomía te ayudará a mantenerte cómodo y concentrado.
¿Por qué es importante?
Cuando tu entorno es ergonómico, tienes menos probabilidades de sufrir dolores de espalda o cuello, e incluso de sentir fatiga.
Una silla de oficina ergonómica, por ejemplo, puede ofrecer sujeción óptima a tu columna, favorecer el movimiento saludable y los cambios de posturas y ayudarte a mantener la energía a lo largo del día. Las sillas de trabajo ergonómicas están diseñadas con mecanismos de basculación avanzados que te permiten inclinarte hacia atrás de forma fluida, manteniendo los pies en el suelo y la vista en la pantalla. Esto fomenta micro movimientos durante la jornada, lo que ayuda a reducir la presión sobre la columna y a mantener el core activo.
Con el tiempo, estos pequeños movimientos pueden contribuir a prevenir problemas de salud a largo plazo y mejorar tu bienestar general.
Piénsalo así: pasas aproximadamente 8 horas al día sentado. Si lo haces en una silla que no ha sido diseñada con criterios ergonómicos, es probable que empieces a sentir molestias con el tiempo. En cambio, una silla de oficina que prioriza la ergonomía hará todo lo posible por ayudarte a sentarte mejor y sentirte mejor.
¿Cómo define Steelcase la ergonomía?
Creemos que todo el mundo merece un espacio que cuide de su bienestar. Nuestras sillas de oficina ergonómicas están diseñadas para moverse contigo, para ofrecer sujeciñon óptima a tu columna y para fomentar cambios de postura a lo largo del día. No se trata solo de sentarse, sino de sentarse mejor, moverse más y sentirse en plena forma.

¿Cómo puedo crear un espacio de teletrabajo ergonómico?
Crear un espacio ergonómico en casa no requiere una gran reforma. Solo necesitas hacer algunos cambios para notar una gran diferencia.
Aquí tienes algunas ideas sobre cómo empezar:
1. Invierte en una silla de trabajo ergonómica
La silla es la base de tu espacio de trabajo. Busca una que:
- Ofrezca sujeción óptima a la curvatura natural de tu columna.
- Permita ajustar la altura y profundidad del asiento, los brazos y la sujeción lumbar.
- Fomente el movimiento y los cambios de postura durante el día, en equilibrio con tu peso.
A diferencia de las sillas rígidas que te obligan a mantener una sola posición, las sillas ergonómicas se mueven contigo. Ya sea que te inclines para coger una libreta, te gires para hablar o te muevas para pensar mejor, la silla se adapta y te acompaña con una buena sujeción en todo momento.
2. Ajusta tu mesa a la altura adecuada
Tu mesa debe permitir que tus codos formen un ángulo de 90 grados al escribir. Si está demasiado alta o baja, puedes acabar con molestias en hombros y muñecas. Considera una mesa regulable en altura.
3. Coloca el monitor a la altura de los ojos
La pantalla debe estar justo frente a ti, con la parte superior al nivel de tus ojos o un poco por debajo. Esto ayuda a evitar tensiones en el cuello y los ojos. Usa un brazo soporte de pantalla, o un soporte de pantalla o incluso una solución casera para elevarlo si es necesario.
4. Mantén los pies apoyados
Los pies deben descansar planos sobre el suelo o en un reposapiés. Evita dejarlos colgando o cruzar las piernas durante mucho tiempo, ya que puede afectar la circulación y la postura.
5. Utiliza una buena iluminación
Una iluminación adecuada reduce la fatiga ocular y mejora tu estado de ánimo. Si puedes, coloca tu mesa cerca y perpendicularmente a una fuente de luz natural y añade una lámpara de trabajo para iluminar bien tu espacio sin reflejos molestos.
6. Haz pausas para moverte
Ni siquiera la mejor configuración ergonómica sustituye al movimiento. Programa descansos cada 30–60 minutos para levantarte, estirarte o caminar. El movimiento mantiene tus músculos activos y tu mente despejada.Ni siquiera la mejor configuración ergonómica sustituye al movimiento. Programa descansos cada 30–60 minutos para levantarte, estirarte o caminar. El movimiento mantiene tus músculos activos y tu mente despejada.

¿La ergonomía es solo para las oficinas?
Afortunadamente, no.
La ergonomía se aplica a cualquier espacio en el que pases tiempo: tu cocina, la zona de estudio de tus hijos o incluso tu rincón favorito para leer. El objetivo siempre es el mismo: crear entornos que se adapten a ti y te resulten cómodos al mismo tiempo que te cuidan.
La ergonomía no es solo una palabra de moda. Es una elección de estilo de vida que puede transformar cómo te sientes cada día. Con solo unos pocos cambios bien pensados, puedes crear un espacio que cuide tu cuerpo y tu mente, mejore tu productividad y potencie tu bienestar.
Si no sabes por dónde empezar, ¡bienvenido! Estás en el lugar adecuado.